Casi la mitad detodos los usuarios de telefonía móvil desechan sus terminales tan solo después de un año, con el consiguiente riesgo de perder miles de archivos valiosos.
Así lo indica un estudio promovido por Kingston Digital Europe, subsidiaria de Kingston Technology Corporation, el mayor fabricante independiente de productos de memoria del mundo. Según la investigación, el 43 por ciento de los usuarios cambian de teléfono móvil cada 12 a 18 meses, mientras un 12 por ciento afirman que renuevan su terminal después de seis meses.
Esta ‘fiebre de actualizaciones’ está aumentando el interés por contar con soluciones que permitan ampliar la memoria, con el fin de facilitar una transición sencilla entre viejos y nuevos terminales. Así, más de un tercio de los encuestados ya utilizan tarjetas de memoria, número que según Kingston Technology se incrementará considerablemente si se pretenden conservar los datos con mayor valor para el usuario.
Igualmente, como consecuencia directa de la creciente convergencia digital, muchos teléfonos incluyen ya cámaras fotográficas de alta resolución, reproductores MP3 y funciones de descarga de vídeo. De esta forma, la ampliación de memoria es más importante que nunca, ayudando a los usuarios de telefonía móvil a guardar archivos de forma fiable y sencilla.
El estudio de Kingston Technology ha desvelado importantes conclusiones:
• El 61,4 por ciento de los usuarios de teléfonos móviles no realizan back-up de sus datos
• Un 41,9 por ciento se han visto obligados a borrar fotos, música y
otros archivos
• El 67,2 por ciento utilizan los terminales para hacer fotografías
• Un 33,9 por ciento se sirven de los teléfonos para almacenar y escuchar música
Según indica Jordi García, responsable de Desarrollo de Negocio en Kingston Technology Iberia, “debido al elevado número de terminales móviles que se cambian por nuevos modelos, es muy habitual que gran cantidad de fotos, música, contactos y otros datos queden ‘atrapados’ en los antiguos teléfonos. Esta situación se agrava aún más teniendo en cuenta que los nuevos terminales requieren incluso mayor capacidad de almacenamiento para aprovechar las funcionalidades de gama alta que ofrecen en la actualidad”.
En este sentido, “la forma más sencilla y efectiva de transferir datos a un nuevo teléfono y asegurarnos de que éste contará con suficiente memoria para disfrutar todas sus posibilidades es utilizar tarjetas de ampliación de memoria; el almacenamiento basado en tecnología Flash consiste así en la única vía para sobrellevar esta fiebre de actualizaciones”, subraya el responsable de Kingston Technology Iberia.
Con el fin de evitar posibles quebraderos de cabeza causados por esta tendencia, es importante elegir una tarjeta con la capacidad adecuada, un precio asequible y la fiabilidad de una marca de prestigio. “Gracias a su amplia gama de soluciones de ampliación de memoria, Kingston Technology puede responder a todas estas demandas”, sentencia Jordi García.
Además, para simplificar el intercambio de datos entre terminales móviles, Kingston Technology ofrece el lector de tarjetas de memoria MobileLite Reader, un dispositivo portátil y compacto.