Con la fuerza que da haber ganado la última Asamblea, en AMETIC han dedicido sacar toda su artillería para denunciar y descalificar a las operadoras. La Asociación, que ahora preside en funciones José Manuel de Riva, ha emitido un durísimo comunicado en el que acusa a las grandes operadoras y a sus proveedores de quebrar el modelo de consenso con el que ha funcionado AMETIC desde su nacimiento. POr su interés publicamos el contenido íntegro del comunicado:
AMETIC ha emitido un durísimo comunicado en el que acusa a las grandes operadoras y a sus proveedores de quebrar el modelo de consenso
La Asamblea General de AMETIC, reunida con carácter extraordinario el pasado martes, decidió -como ya es sabido- rechazar una nueva redacción de los estatutos que, en lo fundamental para la gobernanza de la entidad, entregaba el poder absoluto a algunas de las grandes empresas asociadas, a través de una fórmula de voto ponderado en función de la cuota que se abona para el sostenimiento de la Asociación. Con un resultado abrumador, los asociados rechazaron la propuesta, inclinándose por dar continuidad al sistema de “una empresa, un voto”, manteniendo así el espíritu democrático que ha presidido la Asociación en sus más de 40 años de existencia.
La propuesta de estatutos rechazada, suponía entregar el control de AMETIC a un reducido grupo de empresas -básicamente los grandes operadores de telecomunicación y algunos de su proveedores- que quedarían facultados para imponer su criterio a las más de 270 que integran al día de hoy la Asociación, quebrando con ello el modelo de consenso bajo el que se han venido operando, así como el clima de diálogo, siempre enriquecedor para todas las partes, para tratar de elegir el mejor camino para los intereses comunes de nuestro multisector.
El grupo minoritario de empresas críticas que, en primer lugar, se opuso a la continuidad del hoy presidente en funciones José Manuel de Riva –cuya labor ha sido elogiada en la referida Asamblea-han propiciado un linchamiento mediático de su figura tan absurdo como inicuo. Un escollo salvado con la generosa renuncia de José Manuel de Riva quien, pese a contar con el 78% de apoyos en la Junta Directiva, justo en el momento de proceder a su reelección, sorprendió a la Asamblea electoral, celebrada el 29 de noviembre, explicando que “en un ejercicio de responsabilidad, tras una profunda reflexión, había decidido proceder a la retirada de la candidatura que encabezaba, para dar opción a que puedan concurrir otras que intenten conseguir el consenso entre los Asociados, a través del dialogo y la negociación”.
Un sacrifico que se revela como inútil una vez evidenciado que las empresas críticas no pretendían la renuncia del actual presidente en funciones –el 9 de marzo se celebran elecciones- sino que el objetivo final era el control absoluto de la Asociación. Y así materializaron su baja el pasado 31 de diciembre, condicionando su retorno a la aprobación de sus exigencias vía la aprobación de un nuevo estatuto que las desarrollara.
Así las cosas, los asociados de AMETIC, después de una acción sin precedentes ni en el fondo ni en la forma, por parte de una minoría, han respondido reafirmándose en su espíritu asociativo, en la defensa de la industria tecnológica vinculada a la Economía Digital en su más amplio espectro y en los principios democráticos que la Constitución inspira en nuestra Asociación.
Con la decisión adoptada, entendemos que los Asociados de AMETIC han dado varias lecciones:
- De democracia ante una inquietante deriva monopolística de quienes han considerado que los únicos representantes del sector son ellos y han pretendido acaparar todo el protagonismo en una asociación rica y diversa.
- De dignidad e integridad por parte de los socios de AMETIC, que han negociado hasta el último minuto con máxima generosidad frente a la intransigencia de los que en minoría pretendían gobernar de manera absoluta.
- De firmeza, elegancia y discreción frente a los continuos incumplimientos del deber de confidencialidad y al uso interesado de los medios de comunicación por parte de algunas empresas, que han hecho lo imposible por deteriorar la imagen de la Asociación. Mientras que un grupo de empresas ha establecido una estrategia de desprestigio como apoyo a sus aspiraciones, los asociados de AMETIC, a lo largo del proceso de negociación, se han mantenido concentrados en la misma y han evitado generar controversia pública.
- De espíritu empresarial e industrial, en apoyo de principios elementales de libre comercio, mostrando su compromiso con las estrategias de desarrollo del Mercado Único Digital Europeo y los objetivos de la Agenda Digital, frente a intereses puramente regulatorios y de control de la relación con la Administración y con la política por parte de empresas concretas.
- De identidad, pues con la salida de las operadoras de telecomunicación de mayor tamaño AMETIC queda estructurada al estilo de las patronales europeas del sector TIC, donde el mundo de las infraestructuras, con sus intereses particulares, queda separado de las empresas que realmente impulsan la economía digital.
Desde un punto de vista operativo la Asociación gana flexibilidad para mejorar su apuesta-país y refuerza su compromiso con el crecimiento de la economía, con la inversión en innovación, con la industria) y con el empleo. Y al tiempo, el regulador gana foco a la hora de identificar a todas estas empresas de infraestructuras de telecomunicación en un ámbito separado de AMETIC, pudiendo diferenciar políticas de impulso a la economía digital, de los aspectos meramente regulatorios del mercado de las telecomunicaciones.
Aunque el espíritu de AMETIC era y sigue siendo integrador, posiblemente se ha dado un paso lógico, diferenciando a los operadores de telecomunicación, acompañados por algunos de sus suministradores, del amplio ecosistema de la Economía Digital, tal y como sucede en el resto de Europa. Por un lado, quedan las grandes multinacionales suministradoras de productos de telecomunicación junto con las grandes multinacionales del sector de las telecomunicaciones que ofrecen el servicio. Y, por el otro, queda una Asociación, AMETIC, que representará la pluralidad de la Economía Digital, la innovación, la educación digital y la transformación digital de los sectores productivos, de las Administraciones Públicas y de la Sociedad en general.
Hemos hecho lo posible por mantener la integridad de la Asociación, pero son estas empresas las que han decidido marcharse. Los asociados, por su parte, han decidido no ceder a las aspiraciones de una minoría y continuar, con esfuerzo y sacrificio, la ya larga historia de 43 años de nuestra Asociación
En cualquier caso, AMETIC sigue abierta a todos. No establece vencedores ni vencidos. Considera que los asociados que se marchan lo hacen para establecer una defensa de sus intereses particulares en materia de infraestructuras y servicios de comunicación desde una posición de utilities, diferenciándose de la mayoría de empresas que ya hoy componen el sector digital y de aquellas otras que se están transformando digitalmente y que cada vez más se sienten identificadas con lo que AMETIC representa.