AMD acaba de presentar los primeros equipos que incorporan su nueva clase de procesador acelerado Fusion. Este lanzamiento ha supuesto un punto de inflexión en la estrategia de la compañía. Una de las principales características es que estos procesadores combinan en una pieza de silicio la lógica de una CPU , una GPU o unidad de procesamiento gráfico y el circuito integrado más importante del chipset que gestiona el control de memoria y gráficos o northbridge. Sus principales bazas son su reducido tamaño, mínimo consumo y una potencia que los hace idóneos para enfrentarse a la ejecución de todo tipo de aplicaciones multimedia.
La familia de APUs AMD Fusion proporciona a los desarrolladores de software el poder de liberar su imaginación y acceder a nuevas oportunidades de negocio al crear aplicaciones visualmente intensas sin sacrificar el rendimiento, incluso con los ordenadores pequeños que demandan los usuarios en la actualidad.
Con la llegada de Fusion, AMD ha podido entrar en nuevos segmentos de negocio y nuevos formatos como los tablets. Actualmente, Acer y MSI ya tienen en el mercado tabletas con tecnología AMD, Asimismo, la implantación de sus chips abarca el mercado de los portátiles, los sobremesas o los netbooks con fabricantes como HP, Packard Bell, Lenovo, Toshiba, Asus o Sony, con sus Vaio.
