Según un estudio elaborado por Kaspersky Lab y B2B International de 2015, uno de cada siete usuarios (14%) ha experimentado la pérdida o robo de su dispositivo móvil, esta cifra se eleva al 26% entre los usuarios menores de 24 años. En cuanto a España, también el 14% de encuestados afirma haber perdido o sufrido el robo de su smartphone. De este porcentaje, un 2% tenían dispositivos iPhones, un 10% Android, un 0,5% Windows y cerca de un 1% otro tipo de smartphones.
De ellos, un 13% de los españoles fue sancionado en el trabajo ya que sus smartphones contenían información de la empresa. Asimismo, un 24% descubrió que los datos financieros almacenados en sus dispositivos fueron tratados o utilizados de forma inadecuada.
Entre las medidas que emplearon los usuarios españoles para protegerse tras la pérdida o robo, destaca que un 41% de los usuarios bloqueó su dispositivo con la ayuda del operador móvil o denunciaron el incidente a la policía (48%). Por otra parte, un 20% eliminó de forma remota los datos del dispositivo, mientras que un 18% trató de localizarlo mediante un software de búsqueda.
Alfonso Ramírez, director general de Kaspersky Lab Iberia, asegura que “los dispositivos móviles se han convertido en el eje central de nuestras vidas, nos acompañan a todas partes. Muchos de nosotros almacenamos información sensible y personal, como fotos de nuestra familia, datos bancarios, emails personales o contraseñas de acceso. Sin embargo, pueden convertirse en falsos amigos digitales cuando lo perdemos o nos los roban, ya que puede abrirse una brecha en nuestra privacidad.
“Por tanto, es necesario que protejamos los dispositivos con contraseña, que todos los datos sensibles estén cifrados y que todas las aplicaciones de seguridad estén actualizadas. Usar la función antirrobo como parte de una solución de seguridad para bloquear a terceros, ayudar a localizar dispositivos y eliminar datos personales pueden ayudar a proteger a los usuarios, incluso, después del extravío o el robo”, ha afirmado Ramírez.