Un nuevo incidente de seguridad podría afectar a miles de ordenadores de todo el mundo. Esta vez, sin embargo, no tiene nada que ver con cibercriminales, ni ataques dirigidos, ni Ransomware. Esta vez tiene que ver con un fallo de seguridad detectado en el subsistema operativo de los procesadores de Intel: el Intel Management Engine, también llamado Intel ME.
El fallo en el firmware permitiría ejecutar código malicioso y haría posible que cualquier cibercriminal pudiera tener un acceso completo a un equipo
El fallo en el firmware permitiría ejecutar código malicioso y haría posible que cualquier cibercriminal pudiera tener un acceso completo a un equipo, sin que ninguna de las medidas de protección que tenga instaladas en él (cortafuegos, antivirus, etc.) se den cuenta de que la máquina esté siendo atacada. De esta forma el cibercriminal, no sólo podría controlar el ordenador, sino tener acceso a cualquier dato personal importante y lo que es más importante, este acceso podría realizarse las veces que se quisiera, toda vez que las defensas no van a detectar al intruso.
La multinacional norteamericana ha confirmado este fallo de seguridad que afecta a buena parte de los productos de la compañía. Tal y como expone Intel, la gama de productos afectados son los siguientes:
- Familia de procesadores Intel Core de sexta, séptima y octava generación
- Familia de productos del procesador Intel Xeon E3-1200 v5 y v6
- Familia escalable del procesador Intel Xeon
- Familia de procesadores Intel Xeon W
- Familia de procesadores Intel Atom C3000
- Apollo Lake Intel Atom Processor serie E3900
- Apollo Lake Intel Pentium
- Procesadores de la serie Celeron N y J
La compañía ya ha dado una solución al problema que se puede encontrar a través de este enlace. Sin embargo, en muchos casos, el usuario deberá contactar con el fabricante del hardware para que le solucione el problema